Senderos de Leyenda en las Cinco Villas

Bosques de hadas y desiertos de bandoleros en las Cinco Villas. Un contraste de paisajes diferentes por los que serpentean Senderos de Leyenda. En la comarca de las Cinco Villas abundan los castillos y villas medievales pero también una rica variedad natural: estepas, bosques, sierras y desiertos.

Si me preguntaran hace un año sobre qué ver en la comarca zaragozana, respondería que castillos o villas medievales como Uncastillo o Sos del Rey Católico. Ni de lejos en bosques de hadas y desiertos de bandoleros. Hoy, quizás es lo primero que mencionaría.Como amante de la naturaleza, el Pirineo eclipsaba todos mis planes. Qué equivocado estaba saltándome por norma a su hermano pequeño el Prepirineo.

En la citada comarca de las Cinco Villas puedes encontrar mucha naturaleza: estepas, bosques, sierras... lugares plagados de Senderos de Leyenda. Así se llama el proyecto que Prepyr365 y la Comarca de las Cinco Villas han desarrollado para mostrarte no sólo los lugares más bonitos de esta comarca, si no para contarte sus leyendas, y explicarte los porqués de sus lugares de interés mediante unos mapas y fichas que te servirán de autoguía.

Mediante “tracks” y unas trabajadas fichas con mapas en pdf descargables desde la web www.prepyr365.com, que te servirán de guía, podrás descubrir cada uno de estos Senderos de Leyenda. Gracias a ellos, encontrarás distintos puntos de parada que te aportarán información que cambiará por completo tu percepción del entorno, descubriéndote detalles sorprendentes de los lugares por lo que pasas. No caminas de la misma manera por la Sierra de Santo Domingo, cuando sabes que estás emulando el recorrido que muchos contrabandistas utilizaban para pasar mercancías desde el Pirineo al valle del Ebro. O miras de la misma forma las degradadas ruinas que hay en el Pozo de Pígalo, si conoces que pertenecen a un antiguo molino de dos plantas que abastecía a las poblaciones cercanas ¿verdad?

¿No te ha pasado, al recorrer caminos antiguos, que te gustaría saber un poco más acerca de las ruinas que quedan, las especies que te rodean, o cómo los habitantes aprovechaban los recursos que la naturaleza les ofrecía? Gracias a estas fichas no te perderás ni un detalle.

1. Ruta de las Fuentes

Conocerás la importancia del aprovechamiento del agua para los vecinos de la zona. Como su nombre indica pasaremos por diversas fuentes alrededor del pueblo, pero también por el reciente embalse de Anás, de gran interés ornitológico, o los antiguos pozos de hielo, fundamentales para la conservación de los alimentos. De paso podrás conocer algo sobre el secuestro de los 50 caballeros de Uncastillo que Almanzor realizó para evitar que el Rey Sancho Garcés II siguiera invadiendo sus poblaciones a pesar del pacto de no agresión que tenían. ¿Se trata de un secuestro real o solamente una leyenda?

2. Aguarales de Valdemilaz

En un escenario completamente diferente, en Valpalmas, donde vivió en su infancia el Nobel Ramón y Cajal, los Aguarales de Valdemilaz nos descubren un paisaje que en la zona se conoce como “la pequeña Capadocia”, y es que se dan las mismas formaciones geológicas que en el turístico paisaje turco, solo que a una menor escala. También podrás descubrir cómo los abejarucos agujerean la roca arenisca para establecer sus nidos. Según la época del año, podrás ver a esta llamativa ave migratoria volando a tu alrededor.

3. Ruta de los Barrancos y Ruta de las Lezas

Partiendo de la población de Biel, salen dos rutas de estos Senderos de Leyenda: la Ruta de los Barrancos, y la Ruta de las Lezas. En ambas podrás aprender cómo los habitantes de la zona aprovechaban los recursos que les ofrecía la naturaleza. Por los barrancos de alrededor de Biel se pueden descubrir los muros de contención de los huertos de altura, o cómo bajo un pequeño salto de agua aparece la “tosca”, mineral ligero utilizado en arcos y chimeneas. En la Ruta de las Lezas pasearás por la antigua senda de una mina que llegó a tener 200 trabajadores, y en el mirador de Santo Domingo, podrás ver el increíble contraste, por un lado, de bosques húmedos atlánticos de hayas y robles, y del otro, de pinares y matorrales más característicos del clima mediterráneo.

4. Ralla de la Negra

Cuenta la leyenda que las Bardenas albergaban bandoleros en sus cuevas, y que el más famoso fue Sanchicorrota, al que el mismo rey Juan II de Aragón emboscó con 200 hombres. En “La Ralla de la Negra” verás ese paisaje desértico estepario donde se escondían estos bandidos, y si te fijas bien, la geología guarda aquí una curiosidad inmensa, y es que se puede ver el límite al que llegaba el Mar de Aragón hace miles de años.

5. Pozo Pigalo

Bien distinto es el sendero del Pozo de Pígalo y su antiguo molino en ruinas. A través de un precioso bosque en el que el río Arba es el protagonista, en este camino la fauna se deja intuir con los rascaderos que jabalís y corzos utilizan frotándose en los árboles, o los nidos de buitres que se divisan un poco más lejos en las paredes de Peña Cervera. Si miras de vez en cuando el cielo, podrás ver numerosas aves rapaces sobrevolando la zona.

6. Fayar de Gozapaño

Otro de los bosques más sorprendentes de la sierra es el Fayar de Gozapaño. Este hayedo es uno de los más importantes y amplios de la provincia de Zaragoza, y se dice que albergaba brujas que a su abrigo hacían conjuros, pociones y ritos. La leyenda aquí se mezcla con la realidad, ya que lo que sí sabemos es que en Luesia había curanderas que utilizaban las plantas medicinales para sanar a sus vecinos, y muchas fueron acusadas de brujería por ello. Puede que esos ritos nocturnos tan famosos, fueran simplemente mujeres recolectando plantas ocultándose bajo la noche.

7. Ruta de los peceros

La última de las rutas, pasa por el despoblado en ruinas de Lucientes, y tras un nuevo camino a través del bosque, te llevará a conocer el horno de pez de Longás. El lugar donde fabricaban el famoso oro negro: la pez. Un material que se extraía de la resina del pino y que se cocía en hornos, durante días, hasta conseguir un material viscoso y negro que se utilizaba para impermeabilizar, por ejemplo, toneles de bodegas o botas de vino entre otros.

En estos Senderos de Leyenda, además del interés paisajístico, que te sorprenderá seguro, podrás conocer la realidad de unos pueblos en los que la relación con el entorno natural era necesaria para sobrevivir. Cada punto de interés, te aportará datos

interesantes relacionados con el entorno para que conozcas a fondo los lugares que recorres. Y es que caminar por estas sendas es compartir el camino con ganaderos, comerciantes, bandoleros, caballeros... y hasta reyes del pasado.